Tres cosas que debes saber antes de iniciar un nuevo hábito.

¡Hola! que gusto tenerte aquí de nuevo. Este día quiero hablarte de un tema que me apasiona pero que también me da mucho para seguir aprendiendo y este es "la identidad" nuestra identidad se compone de creencias, comportamientos y hábitos y estos podrían ser nuestra firma, esas cualidades u oportunidades que nos definen y nos representan ante los demás, estos elementos de nuestra identidad, así como la misma identidad suelen acompañarnos para toda la vida de una manera muy arraigada y muchas veces imperceptible ante nuestros ojos y los que nos rodean de cerca, peo ¿qué pasa si un día descubres (como espero que ya lo hayas hecho) que puedes ser otra persona, crear otras creencias, generar nuevos hábitos y alterar cualquiera de tus comportamientos? ¿Será que perdemos absoluta identidad? ¿nos perdemos a nosotros mismo? ¿Nos confundimos? ¿Nos dejamos influenciar?

La respuesta es que sí a todo, pero depende de quién lo diga... 

Frecuentemente ocurre a mis clientes y ya me ha ocurrido a mí también que lo primero que sucede cuando quiero dejar un mal hábito o comenzar uno bueno las personas a mi alrededor cuestionan si lo hago por mi o por alguien más, si realmente lo quiero hacer o solo es para generar incomodidad en el resto, o si es una nueva moda que vi en Instagram, así mismo mis clientes comparten experiencias similares e incluso algunos me han contado como sus propios familiares y amigos los ponen a prueba constantemente para "ver que se trate de un verdadero cambio" y es que cuando alguien de nuestro circulo mejora, nos incomoda de una u otra forma, ya que si alguien con nuestras mismas oportunidades está creando cambios importantes, ¿cuál pretexto podría poner yo para no generar lo que yo deseo?

Muy a menudo cuando hablo de la manifestación, la gratitud y la meditación como motor de todo lo que por ahora he logrado generar, las personas que me conocen de hace tiempo cuestionan mi conectividad o espiritualidad y me comparan con mi versión del pasado, escucho comentarios como "por favor, si te encantaba la fiesta" o "pero como que ahora meditas si eras boxeadora" bueno, ciertamente tengo que decir que aun practico el box y a veces salgo de fiesta y vuelvo a mi casa muy tarde, eso sigue siendo parte de mí, de lo que disfruto, sin embargo una cosa no está peleada con la otra porque aún así practico tanto la meditación, la conexión espiritual, el cuidado corporal, la manifestación y de más herramientas como una fuente de poder interna que me permite levantarme de la cama y generar cambios importantes en mi día a día. 

No vivo peleada como si dos personas vivieran en mí, ambas versiones habitan mi ser y coexisten y no perdí identidad ni "dejé de ser yo" pero he aprendido a usar lo mejor de mis versiones y a buscar un equilibrio. 

Ahora bien, volviendo al inicio ¿qué son las identidades?

Bueno, son el conjunto de cosas vinculadas una con otra que nos caracterizan, componentes sociales, creencias, hábitos, conductas, reacciones, cultura, valores, percepciones, etc. Estas cosas se van componiendo a lo largo de los años, pero desde nuestra gestación y hasta que dejamos ese plano, es curioso como mucha gente defiende su identidad como si fuera absolutamente incorregible, inflexible, imposible de modificar, pero si todo lo anterior que te comparto es parte de nuestra identidad, ¿qué pasaría si entonces cambiamos una creencia por determinadas experiencias? ¿o si por salud cambiamos un hábito? ¿Crees entonces que dejaríamos de ser "nosotros"? Yo creo que sí, pero está bien, porque sinceramente yo ya no quisiera ser la que era a principios de mis 20´s, ¿entonces qué tendría de malo ser otra versión de mi a mis 40? ¿Por qué sería malo que cuando tenía 20 mi rasgo más característico fuera un cigarro en la mano y ahora sea que corro todas las mañanas? ¿Me explico?

Cuestionando todo esto entendí que lo mejor que me puede ocurrir es autoevaluar mi personalidad y buscar generar cambios constantes en lo que yo considero no suma a mi "mejor versión", no soy la maquita de la evolución, me tardo, recaigo, lo olvido y vuelvo a comenzar, lo cierto es que lo hago todos los días y procuro mejorara a diario, por ejemplo este blog, al principio escribía una vez cada quince días y luego nada por tres meses, luego de nuevo, luego una vez por semana, ahora escribo todos los día, cuando comencé a hacerlo diario me di cuenta de que no tenía suficiente conocimiento para compartir algo nuevo todos los días, así que comencé a leer una hora al día, diferentes libros para comenzar a tener más temas que escribir, y así cuando menos me di cuenta ya era alguien que leía y que su rasgo característico era ir en el transporte público o en el parque con un libro, un marca textos y un café. 

A lo largo del tiempo se irán modificando otras situaciones y conductas, creencias, hábitos y gustos, y muy probablemente las personas que me conocen ahora y que empatizan conmigo ahora en un tiempo ya no lo hagan. El punto a rescatar en todo esto que te estoy compartiendo es que no tiene nada de malo la mejora, el cambio, la evolución y que se requiere ser valiente para generar esos cambios a pesar de costo, porque cuesta perder amigos, identidad, costumbres y hasta tradiciones familiares o sociales por la mejora, pero no estás solo o sola, habemos muchas personas buscando un cambio en nuestro interior y nuestro entorno y aunque sea por medio de pantallas debes saber que no, la lucha no es solo tuya.

Para terminar con esto y que te lleves algo de valor de este blog te dejo __ pasos a seguir para saber exactamente por donde empezar con tus nuevos hábitos

1. Cuestionarnos

Cuestionar lo que estamos siendo en este momento y si el compuesto que formamos ahora nos funciona y es útil para el camino que vamos a emprender hacia "quien queremos ser"

2. Define

¿Realmente sabes quién eres y quien quieres ser? No te preocupes si ahora mismo no sabes quién eres o no tienes idea de cómo definirte, ahora mismo importa más quien deseas ser. Describe específicamente la persona que deseas ser, con todas sus cualidades, hábitos, creencias, gustos, etc. A qué hora te levantas, qué desayunas, qué agradeces, todo lo que puedas percibir de la persona en la que te quieres convertir. 

3. Establece

Una vez que tengas claro lo que quieres lograr puedes establecer pasos a seguir para ser la versión que quieres tener de ti mismo cuanto tiempo te llevarán estos pasos. 

4. Temporiza

Todo lo que te propones, planteas o definas deberás establecerlo con una fecha clara para que se cumpla, se realista y amable contigo para que no te frustres y sí lo consigas.

Sigue mejorando y deseo que tu camino sea ligero. 

Nos vemos pronto.